A base de la denuncia del espionaje realizado por el ejercito, la Oficina en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU cuestiono este domingo que la inteligencia militar se utilice para vulnerar los derechos y no para protegerlos.
Pronunciamiento por parte de la oficina DD. HH sobre los seguimientos ilegales a periodistas.
Con base en la investigación de la revista Semana, miembros que hacen parte del Ejército espiaron por lo menos a 130 personas, entre ellos periodistas nacionales y extranjeros, sindicalistas e incluso generales y miembros del Gobierno.
La organización dio un comunicado: «La Oficina expresa su profunda preocupación por estas denuncias públicas que señalan la existencia de agresiones frente a la labor de defensoras y defensores de derechos humanos, entre otras personas»
Dicha investigación reveló que se crearon perfiles de los afectados que incluyen gráficos sobre sus movimiento, trabajos periodísticos, contactos, familiares.
Por ello la oficina indicó «la regulación e implementación de actividades de inteligencia debe guardar correspondencia con la garantía de protección de los derechos humanos, no vulnerarlos».
A su vez ratificó «su apoyo y su solidaridad con el trabajo legítimo de defensoras y defensores de derechos humanos, periodistas, miembros de partidos políticos, jueces y otras personas, en Colombia»
Además solicito avanzar con la investigación de los responsables materiales e intelectuales de estos delitos, al igual que implementar un mecanismo efectivo de depuración de archivos en conjunto con la Procuraduría.
El Ministerio Público anunció que asumiría el proceso disciplinario para militantes de inteligencia del Comando de las Fuerzas Militares por los seguimientos a estos ciudadanos.
Por último la oficina dijo «ya que su trabajo de buscar y difundir información veraz y de abrir espacios de participación a diversidad de voces en la sociedad es uno de los pilares de las democracias».